jueves, octubre 05, 2006

"Ahora presenciamos el triunfo del tiempo"

El otro día me cruce con un amigo que se había peleado con su novia. Entre otras cosas esto fue lo que me dijo:
La re concha de su madre. Esa hija de puta no se merece vivir. Pero sabes que, Nico. Que se vaya bien a la mierda la putita esa. En un par de años se va a poner gordita y va a volver pidiendome por favor que le de la dieta de la luna. Lo que pasa es que la hice pensar demasiado. Esa cheta puta no sabia de que carajo le estaba hablando. Penso que por fin iba a dejar de ser estúpida. A veces simplemente la estupidez puede un toque mas. Vos no te das una idea las cosas que le dije, Nico. Aparte se lo decía en voz baja, despacio. Nosotros los negritos, Nico, tenemos algo que los rubiecitos chetos no tienen. Va a salir a buscar una pija y se va a encontrar con pijitas. Va a salir a buscar a alguien que la haga gritar como lo puta que es. Pero no entiende que las frigidas como ella no tienen remedio, y menos que menos si les meten una pijita.
Yo mucho no entendia. Mi amigo puteaba y yo no sabia porque estaba tan enojado.
Pero que te hizo?
Nada. Que me va a hacer. Un día se dio cuenta que conmigo se casaba la puta. Se mojaba con solo mirarme. Y se cago hasta las patas. Pero ya va a volver, ya va a volver y yo se la voy a volver a dar. Se la voy a dar despacito, de a poco. Después se la voy a dar fuerte y mas rapido. Y cuando este a punto de acabar la puta, saco, me levanto el pantalon, le dejo unos mangos y me voy para mi casa. Y que se vaya bien a la re concha de su madre. Vamos a fumar un porrito?
Vamos!

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Durante mi luna de miel

con la droga

Caronte me llevaba de paseo

en un taxi fino y rojo.

Yo nunca bajaba las ventanas

ni permitía que me pidieran dinero en los semáforos.

Después, todo pasó.

De ese tiempo me queda

un beso frío en el hígado

y cierta arqueología

en la paranoia.




Fabián Casas